El Salar es un buen spot para relajarte, disfrutar, meditar, caminar y también para tomarte unas buenas fotos. La naturaleza tiene muchísimas maneras de expresarse, y podemos vivirlo a simple vista. Entre un escenario blanco y distinto al que estamos acostumbrados a ver en el desierto, pero con el típico ambiente cálido del norte mexicano, El Salar nos espera para apantallarnos con su belleza.
Localizado a una hora de Mexicali rumbo a San Felipe, El Salar se ha convertido en un espacio libre de urbanización, que te invita a disfrutar del ecosistema con todos tus sentidos. Con la vista, podrás asombrarte del bello rastro que genera un fenómeno natural, haciéndote sentir en un lugar completamente diferente al de Baja California e invitándote a la contemplación. Con el olfato, identificarás el característico aroma a mar, y si te atreves, aspira por la boca y saborea la brisa; ¿a qué te sabe? ¡A sal! Además, si guardas silencio y cierras los ojos, podrás escuchar el sonido del viento chocando entre las montañas que se encuentran al otro lado de la carretera, aves volando sobre El Salar y mientras caminas, podrás escuchar el crujir de la sal a cada paso que das. ¡Atrévete a explorar y toca! Con tus manos, siente lo rígido que la roca de sal puede ser, aprecia sus cubos perfectos y cómo forman lo que pudieran parecer piedras preciosas.
Recordemos un poco a nuestras clases de ciencias naturales. ¿Qué sucede aquí? Resulta que, en este punto, el Río Colorado y el Mar de Cortez llegan a encontrarse de vez en cuando al subir la marea, provocando que el agua forme estancamientos o lagunitas, por llamarlos de alguna forma. Estos espejos de agua se irán evaporando debido a las altas temperaturas de la región, dejando una capa cristalina de la única roca comestible: sal.
Además de ser un lugar tranquilo y relajante, también es un ideal escenario para fotografías increíbles. Ya seas un profesional de la cámara o un fotógrafo de celular para tus redes personales, los distintos matices naturales, el ambiente, los colores y la luz natural formarán una composición visual única. ¡Ponte creativo y muestra tus fotos!
Ah, un dato interesante… ¿Cuánto cuesta el acceso? ¡Absolutamente nada! Las mejores cosas de esta vida son gratis, aprovéchalas y cuidemos juntos de ellas.
Es súper sencillo, pero aún no se cuenta con el típico letrero que diga “Bienvenido a El Salar”, entonces hay que estar atentos. Viniendo de Mexicali, hay que tomar la carretera 5 (Mexicali – San Felipe). La entrada ideal para estacionar tu carro se encuentra entre el kilometro 104 y 105, donde podrás encontrar el acceso sobre la carretera a tu lado izquierdo.
Es más, ¡no nos compliquemos! Si quieres más precisión para tu llegada, aquí te dejamos las coordenadas exactas para que localices de una manera fácil y rápida. Guarda este blog y cuando estés en camino, haz clic directamente desde tu celular al siguiente link, ¡y llegarás sin problemas! Estas coordenadas te llevan directamente al punto donde podrás iniciar tu caminata. 31.749500, -115.072972
Deja tu carro casi en la entrada, ya que a medida que vas avanzando en El Salar, la tierra está más húmeda y lodosa, por lo que te puedes quedar atascado, mermando tu experiencia. Además, el camino se vuelve súper estrecho, y tal vez se te complique salir, así que mejor a la segura. Una vez que te estaciones, baja de tu carro y disfruta el paisaje. Podrás caminar el tiempo que tú quieras y adentrarte a este paisaje impactante y cálido en dirección al Mar de Cortez.
¿Entonces qué, te animas a venir? Toma todas las fotos que puedas, súbelas a tu Instagram y no olvides etiquetarnos en @disfrutamexicali.
¡Disfruta el trip, disfruta Mexicali!